Una exposición fotográfica, sobre la reconstrucción de la segunda réplica de la Goleta Ancud, es la muestra que por estos días puede ser visitada en la Casa de la Cultura de Ancud.
En la muestra es posible conocer como fue tomando forma esta réplica, en fotografías que fueron plasmadas para siempre por Rodrigo Muñoz C.
Es importante recordar que día 3 de mayo de 2007, se inauguró, en el Patio de los Recuerdos del Museo Regional de Ancud, la reposición de la réplica de la Goleta Ancud, con un acto organizado por la Armada de Chile en el marco de la celebración del Mes del Mar.
El proyecto tuvo un costo final de 54 millones, el cual fue financiado por el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), a través de un proyecto presentado por la I. Municipalidad de Ancud. Cabe destacar que este proyecto fue ejecutado utilizando las técnicas tradicionales de la carpintería de ribera de Chiloé y en base a los planos encontrados en el Museo del Tigre de Buenos Aires. Para la construcción se utilizó solamente madera de ciprés de la Guaytecas, lo que garantiza la conservación de esta réplica en el tiempo.
Para el éxito de este proyecto fue fundamental la participación de la Fundación Abel Macías en las etapas de diseño, gestión y supervisión técnica de las obras realizadas.
En la muestra es posible conocer como fue tomando forma esta réplica, en fotografías que fueron plasmadas para siempre por Rodrigo Muñoz C.
Es importante recordar que día 3 de mayo de 2007, se inauguró, en el Patio de los Recuerdos del Museo Regional de Ancud, la reposición de la réplica de la Goleta Ancud, con un acto organizado por la Armada de Chile en el marco de la celebración del Mes del Mar.
El proyecto tuvo un costo final de 54 millones, el cual fue financiado por el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), a través de un proyecto presentado por la I. Municipalidad de Ancud. Cabe destacar que este proyecto fue ejecutado utilizando las técnicas tradicionales de la carpintería de ribera de Chiloé y en base a los planos encontrados en el Museo del Tigre de Buenos Aires. Para la construcción se utilizó solamente madera de ciprés de la Guaytecas, lo que garantiza la conservación de esta réplica en el tiempo.
Para el éxito de este proyecto fue fundamental la participación de la Fundación Abel Macías en las etapas de diseño, gestión y supervisión técnica de las obras realizadas.
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